Por: Prof. Ivan Rodríguez B / Director Envapack.Com
Hoy, los empaques, envases y embalajes son algo mas que simplemente el materialice que protege, conserva y transporta un producto. Actualmente, los empaques, envases y embalajes se han convertido en una poderosa herramienta de mercadeo. Un empaque bien diseñado comunica su marca y su valor al consumidor logrando captar su atención y ayuda a decidir la compra y a generar lealtad.
A continuación, se destacan las principales formas en las que el packaging funciona como estrategia de marketing:
1. Primera impresión y diferenciación
Los empaques, envases y embalajes son el primer son un canal de comunicación directa con el consumidor; y por esta razón es que un diseño diferente y atractivo lo diferencia de la competencia y le dá una personalidad.
Colores y formas llamativas, innovadoras y materiales diferenciados facilitan la recordación de marca.
Ejemplo: La forma y tipografía del envase de Absolut Vodka transmite su personalidad de calidad, lujo, y exclusividad.

2. Comunicación de valores y personalidad de marca
En la Tipografía de un envase, el diseño y los mensajes incluidos reflejan los valores de la empresa. Un empaque ecológico, por ejemplo, comunica sostenibilidad y responsabilidad social, algo que cada vez es más apreciado por los consumidores conscientes.
Ejemplo: Muchas marcas evitan en sus envases, el uso de plásticos y prefieren materiales reciclares para para transmitir su compromiso con el medio ambiente.
3. Influenciar la decisión de compra
Por ejemplo, el etiquetado ambiental también transmite información relevante: ingredientes, certificaciones (como “orgánico” o “sin gluten”) y beneficios del producto. Este tipo de información genera confianza y motiva la compra.
En otro ejemplo las etiquetas nutricionales con “sin azúcar” o “alto en proteína” influyen en los consumidores que buscan productos saludables.
4. Experiencia del cliente
El momento del unboxing (desempaque) se ha convertido en una experiencia clave en la que el empaque añade valor emocional. Empaques creativos y bien presentados crean una experiencia memorable que los consumidores comparten en redes sociales, ampliando la visibilidad de la marca.
Ejemplo: Marcas de lujo como los celulares iPhone diseñan empaques minimalistas y elegantes, maximizando la experiencia del cliente al abrir sus productos.
5. Lealtad y marketing boca a boca
Un empaque innovador o reutilizable motiva a los consumidores a conservarlo, lo que prolonga la exposición de la marca. Esto también generará lealtad de marca y alentará recomendaciones de boca a boca en redes.
Ejemplo: Los envases de hojalata reutilizables, como las de algunas marcas de té o café, se convierten en objetos útiles para el consumidor más allá del producto inicial.
6. Uso de tecnología y tendencias digitales
Los envases actuales puede integrar tecnología, como códigos QR o etiquetas NFC, para conectar al consumidor con contenido digital, promociones o experiencias interactivas. Esto genera una mayor interacción con la marca.
Ejemplo: Algunas botellas de vino permiten escanear un código para conocer la historia de la bodega o recomendaciones de maridaje.
Conclusión
En el marketing sensorial moderno, el empaque o envase es un recurso estratégico de marketing porque impacta y despierta emociones, transmite el valor de la marca y puede influir directamente en la decisión de compra. Las empresas deben diseñar empaques no solo funcionales, sino también alineados con las expectativas del consumidor moderno, aprovechando tendencias como la sostenibilidad, la estética y las experiencias digitales para maximizar su impacto.
